Cómo acompañamos | Espacio Éssere

Partimos de la Gestalt

Según la AETG (Asociación Española de Terapia Gestalt) :

La Terapia Gestalt es un enfoque terapéutico perteneciente a la corriente humanista-experiencial y es reconocida por la APA (American Psychological Association) como una de las principales corrientes de este movimiento, con el que comparte el reconocimiento de la libertad, la responsabilidad, la capacidad de elección, la conciencia, la intencionalidad y la autorregulación como características principales de la naturaleza humana. (Texto recuperado de https://aetg.es/terapia-gestalt)

La terapia Gestalt es una forma de psicoterapia centrada en la conciencia de sí mismo que se enfoca en el aquí y ahora.

Esta forma de terapia ayuda a las personas a comprender cómo están interrelacionados sus pensamientos, sentimientos, emociones y acciones, lo que puede tener un profundo impacto en su vida diaria. Esta comprensión mejora la capacidad de las personas de solucionar sus problemas, satisfacer sus necesidades y tomar decisiones más acertadas.

¿En qué consiste?

Aquí y ahora

En terapia Gestalt, enfocarse en el aquí y ahora permite tomar conciencia del momento presente. A través de preguntas sencillas, el terapeuta ayuda a conectar con lo que sentimos, transformando nuestra relación con el pasado y el futuro.

Toma de conciencia

Vivir en el aquí y ahora requiere ser conscientes de lo que sentimos y experimentamos. El darse cuenta facilita la autorrealización y fortalece la inteligencia emocional al reconocer cómo vivimos nuestras experiencias.

Autoresponsabilidad

Aceptar lo que sentimos implica hacernos responsables de nuestra vida. Desde la terapia Gestalt, asumir la responsabilidad nos libera, nos conecta con el presente y fortalece nuestros recursos para afrontar las dificultades y dar sentido a nuestra existencia.

El vinculo y el dialogo

En el acompañamiento Gestáltico, el diálogo es esencial. La relación entre terapeuta y paciente crea un espacio de confianza que facilita el autoconocimiento y el crecimiento personal.

Nuestro acompañamiento
sensible al trauma

Acompañar con sensibilidad al trauma es una forma de cuidar y respetar el proceso interno de cada persona, esté o no marcada por grandes heridas. Es un acompañamiento que prioriza la calma, la seguridad y el consentimiento, ayudando a sanar desde un lugar de confianza y sin forzar nada.

En Espacio Éssere acompañamos los procesos de trauma desde una mirada profundamente respetuosa con el cuerpo, el ritmo y la historia personal de cada ser.

Nuestra formación en Trauma, nos enseña a cuidar el sistema nervioso a través de principios que guían cada encuentro terapéutico:

Bienvenida: Creando un espacio seguro donde todo lo que traes es recibido sin juicio.
Cooperación y Soporte: El proceso se construye juntes, desde el respeto y la colaboración.
Elección: Cada paso se ofrece desde el consentimiento, respetando tu capacidad de decidir en todo momento.
Autocuidado: Fomentamos que escuches y atiendas tus propias necesidades internas durante el proceso.
Pausa y Autorregulación: Hacemos espacio para respirar, sentir y volver al equilibrio siempre que lo necesites.
Contacto Visual Breve y Frecuente: Un contacto amable que sostiene la presencia sin invadir.
Contacto y Atención Negociada: Toda interacción corporal o emocional es consensuada y flexible.
Confidencialidad: Cuidamos la intimidad de todo lo que compartes, honrando tu confianza.

Acompañar el trauma para nosotras es caminar contigo desde la presencia, el consentimiento y la búsqueda de una seguridad sentida en el cuerpo. Cada sesión es un espacio para reparar, integrar y reconectar con tu fuerza interna, a tu propio ritmo.

¿Cómo funciona una sesión?

1. Primera toma de contacto

Sabemos que dar el primer paso puede generar dudas. Por eso ofrecemos, si lo necesitas, una primera entrevista gratuita de unos 20 minutos —presencial u online— para que puedas tener un primer contacto, resolver tus preguntas y sentir si este espacio es para ti.
Puedes elegir directamente a la terapeuta con la que te resuenes más, o contactar con una de nosotras, que de forma honesta y cuidada, te orientará hacia la profesional que mejor pueda acompañarte, ya sea por tu zona, tu disponibilidad, o el tipo de demanda que traes.

2. Un espacio seguro y confidencial

Cada terapeuta cuenta con su propio espacio físico: cálido, acogedor, con luz natural, climatización y materiales para trabajar desde lo corporal o lo creativo si es necesario.
Son lugares donde podrás expresarte con libertad, sabiendo que tu proceso será respetado en su totalidad.
Todas trabajamos desde el código deontológico de la terapia Gestalt, en el que se contempla el secreto profesional, la confidencialidad y la ética como pilares fundamentales.

3. Ritmo propio

Cada proceso tiene su tiempo y su forma. Algunas personas llegan con una demanda concreta, otras inician un camino de crecimiento más amplio.
No imponemos duración ni frecuencia fija. Acompañamos desde lo que tú necesites, y hacemos sesiones de revisión cuando lo sientas necesario, para valorar juntas cómo estás y cómo continuar.

4. Enfoque integrador y humano

Aunque la palabra es una herramienta importante, no es la única.
Muchas veces trabajamos también desde lo corporal, el juego, el movimiento, lo simbólico o lo artístico, según la formación y la sensibilidad de cada terapeuta.
Cada una de nosotras aporta sus propias herramientas, pero nos une una misma forma de estar: con presencia, calidez y humanidad.

5. Acompañamiento a personas y vínculos

Acompañamos a niñxs, adolescentes, adultxs, parejas, familias y grupos.
Creemos que acompañar vínculos también es una forma de cuidar el mundo emocional.
Nos acercamos a cada historia con respeto, sin juicio, y con una mirada sensible a los momentos vitales por los que atraviesa cada persona o sistema.

6. Derivación y red de colaboradores

En Espacio Éssere no realizamos trabajo en red como tal, ya que somos profesionales del acompañamiento emocional, no sanitarias.
Pero cuando una demanda lo requiere, contamos con colaboradorxs de confianza que pueden ofrecer un acompañamiento más específico o complementario, y derivamos con honestidad cuando sentimos que otra persona puede ofrecerte lo que necesitas.